Los bereberes se denominan, los amazigh, el pueblo libre. A lo largo de
la historia han recibido distintos nombres: Los griegos lo llamaban Libios, los
romanos numbianos y africanos y la Europa medieval moros. Los amazigh son los
pueblos autóctonos del norte de África, presente en Marruecos hasta Egipto, que
han mantenido celosamente su lengua, sus tradiciones, entre ellas las
vestimentas.
Sus joyas nunca fueron de oro, ellos piensan que el amarillo del oro da mala suerte, sino de plata, que tiene un color blanco asociado a la pureza, que se cree que evita el reumatismo y que protege contra el mal de ojo omnipresente en Marruecos rural.
Las joyas y la forma de llevarlas indican el origen geográfico, el estatus social y permite conocer si una mujer está casada, soltera o viuda, completando la información que también dan los vestidos y tatuajes.
Su simbología es riquísima,
aunque está fuertemente influenciada por el Islam, cuyo rechazo de la
representación corporal de los seres humanos y animales ha conducido a una gran
esquematización y abstracción en sus diseños.
Muchas joyas como los collares,
colgantes, fíbulas incorporan pequeños estuches donde se insertan trozos de
papel con inscripciones del Corán o trocitos de tela que han tocado la tumba de
un hombre santo.
En un mundo poblado de
diablillos, las joyas sirven para protegerse de ellos. Así las representaciones
estilizadas de serpientes y escorpiones protegen de la mordedura de estos animales. Cuando aparece peces, tortugas o ranas se asocian con la idea de la
fecundidad. También tiene este significado la fruta. El árbol se representa
invertida para significar que sus raíces absorben el conocimiento en la bóveda
celeste para repartirlo sobre la tierra.
Son frecuente las
representaciones humanas hechas de forma muy esquemática. El triángulo
invertido se asocia con el sexo femenino. Una línea quebrada es el agua
portadora de vida, si se representa vertical da idea de rayo destructor. Donde
nosotros vemos una circunferencia, ellos ven un sol, un cuadrado un mundo, un
triángulo una mujer.
Los collares son importantes como
talismanes. En las bodas se meten las pulseras y anillos de la desposada en un
tazón de leche para garantizar la descendencia sana.